Cuenta la
biblia que tres Reyes muy sabios, adinerados, influyentes y poderosos, fueron a
buscar al niño que había
nacido en Belén. El Rey Herodes los mando a averiguar donde había nacido el niño
porque también quería adorarlo. Todos
sabemos que esa no era su verdadera intención.
La estrella fue su GPS y llevo a los tres sabios directo a donde el
estaba. Nació en un pesebre muy humilde. Pudieron pensar que ese no era el rey.
Pero no dieron lugar a la duda y tan
pronto vieron al niño le adoraron y le entregaron regalos muy valiosos. Esa noche Dios le mostro en un sueño
que se fueran por otro camino y no regresaran a Herodes. En esta historia vemos algunas cosas interesantes. Tres hombres decididos a adorar al nuevo Rey
a pesar de que ellos también eran reyes muy influyentes. Reconocieron que el que había nacido era el
elegido de Dios. A pesar de que el Rey
Herodes los manda a averiguar donde había nacido el niño, tan pronto Dios se le
revela en un sueno, ellos obedecen inmediatamente. Y lo más que me gusta de la historia es que
fueron y lo adoraron sin dudas ni reservas y le entregan valiosos regalos a Jesús
y a sus padres, que en ese momento eran desconocidos para ellos. Tuvieron buen discernimiento y dieron con su
Rey.
HOY TE DIGO que es el día de adorar a tu Rey. No se cuan influyente eres, cuan rico o cuan
poderoso. No se quien te envió o con que
intenciones llegaste. Pero si se que tan
pronto veas al Rey querrás adorarlo y entregarle lo más valioso para ti. No permitas
que la duda te asalte. No te
importen las opiniones o versiones de los demás. Ve con corazón dispuesto ante tu rey. Adórale y entrégale tu presente hoy: entrégale
tu corazón.
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