lunes, 9 de julio de 2012

DIFICIL PARA MI?


A veces la lógica humana y las conclusiones nuestras dicen una cosa, pero la misericordia de Dios es tan grande que cambia las cosas.  Lo que estaba destinado al fracaso, a la desolación y a la derrota, Dios lo cambia por favores a nuestra vida.  “Habrá algo que sea difícil para mí”, eso preguntó Dios en Jeremías 32:27.  El pueblo de Israel hizo lo malo ante los ojos de Dios, provocaron el enojo de Dios; adoraron otros dioses y cometieron muchos pecados. Lo normal era que Dios en su enojo destruyera este pueblo o ellos mismos se destruyeran, pero la naturaleza de Dios es perdonar y renovar.  A pesar de su enojo con este pueblo decide reunirlos, los hace regresar para que vivan en paz y seguridad.  Y hace una declaración poderosa:  “ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios”.  Vuelve a intentar, vuelve a creer en los hombres, vuelve a darles una oportunidad a sus hijos.  Lo hace de esta manera:  “les daré un corazón y un camino” y “hare con ellos pacto eterno, nunca dejare de hacerles bien, pondré en el corazón de ellos el deseo de adorarme y nunca me dejaran.   Me gozaré en hacerles bien y con fidelidad y de todo corazón los volveré a plantar en esta tierra” y por ultimo les dice”  “así traeré sobre ellos todo el bien que les he prometido y poseerán heredad, compraran y venderán terrenos con escrituras firmadas y selladas”.  O sea,  se merecen un castigo, pero El le cambia el corazón malo que tienen y le da una nueva oportunidad.  Como los ama tanto, aunque no se lo merezcan, mejor le cambia su mentalidad y le entrega las bendiciones que tenía preparadas para ellos. 

HOY TE DIGO que en ocasiones en la vida nos apartamos de Dios, hacemos lo malo ante sus ojos, lo hacemos enojar, pero sus misericordias son tan grandes que siempre busca la forma y manera de hacernos reaccionar.  Como este caso, le puso un corazón nuevo, le marcó un nuevo camino, los ayudó y los hizo heredar su tierra.  La naturaleza de Dios es ayudar y enderezar su camino, y eso siempre hará con sus hijos.  Buscará la manera para que se cumpla el propósito de Dios sobre tu vida, a pesar de tu mal comportamiento.  Sus misericordias nos alcanzan cada día.  

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