sábado, 14 de enero de 2012

ORDEN DE BENDECIR


“He aquí, he recibido orden de bendecir; El dio bendición, y no podré revocarla” (Números 23:20)  Esta es una palabra que debes recibir en tu corazón.  Cuando Dios ordena bendiciones para ti, no hay manera de revocarlas.  Es la historia del Rey Balac que pedía a un hombre de Dios llamado Balaam que maldijera a los enemigos, porque eran muchos y lo iban a vencer.  La única solución a su problema era este hombre; de quien se decía que cuando bendecía en nombre de Dios la bendición llegaba pero cuando maldecía, también llegaba la maldición. En varias ocasiones este Rey le pide que maldiga a este pueblo, y tras consultarlo con Dios, El le ordena que no lo maldiga.  Ante tanta insistencia de este Rey, y tras Dios contestar lo mismo una y otra vez, declara esta palabra profética a favor de esta nación.  Y sucedió así, que Dios bendijo este pueblo y nunca revocó su bendición.

HOY TE DIGO que hay orden de bendición para tu vida, y nadie podrá revocarla.  No importa cuánto tus enemigos le cuestionen a Dios, si eres merecedor de esta bendición, llegara a tu vida y nadie podrá impedirla.  Las bendiciones que Dios te va a entregar fueron asignadas para ti y aunque el universo se oponga, llegaran porque hay orden divina para eso.  Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta (Núm. 23:19).  Jamás Dios cambiara de opinión cuando ya ha decidido bendecirte.

No hay comentarios: