martes, 14 de junio de 2011

LO QUE CALLAS

Podemos hablar a los demás sobre algunas cosas en nuestra vida, pero siempre nos guardamos algo que nadie tiene que saber.  Queremos mantener nuestra vida privada y hablamos sobre los hijos, la pareja, el trabajo, la casa, el clima, las noticias.  Pero en tu privacidad tienes cosas reservadas para ti que no le cuentas a nadie.  Esa herida que todavía si te la mencionan te duele, ese recuerdo que te perturba, esa persona que siempre te altera, esa sensación de estar en tu pasado, ese secreto que no has contado.  Tienes tus íntimos pensamientos que nadie sabe, que a nadie le cuentas, que sacas a pasear de vez en cuando y primero observas que nadie te vea.  Pero ese pequeño secreto que crees que nadie sabe, que lo consideras insignificante, que crees que no te afecta, tiene un gran peso sobre tu vida y tienes que sacarlo para tu propia sanidad interior.  En Salmos 139 habla de una relación con Dios que no tienes idea.  Habla de cuando abres tu corazón a Dios y le dices: 'Dios mío, tú me conoces muy bien; ¡sabes todo acerca de mí!  Sabes cuándo me siento,  cuándo me levanto; ¡aunque esté lejos de ti, me lees los pensamientos!  Sabes lo que hago y lo que no hago; ¡no hay nada que no sepas!  Todavía no he dicho nada, y tú ya sabes qué diré.  Me tienes rodeado por completo; ¡estoy bajo tu control!  ¡Yo no alcanzo a comprender tu admirable conocimiento! ".  Entonces, que le puedes ocultar a Dios?  Si el sabe todos, todos tus pensamientos antes de que lleguen a mi mente, desde lejos. Es el momento de hablar con Dios y decirle: a ti no puedo ocultarte nada, tu sabes todo de mi, inclusive lo que aún no he pensado, no puedo tratar de engañarte.  Pues hoy voy a abrirte mi corazón y ayudame a sanar todo lo que esté en mi vida y que de alguna manera me afecta,  ayúdame a superar todo lo que aún está en mi corazón y no debería estar.  Que pueda sanar por completo y así agradarte en todo.  
 
HOY TE DIGO que Dios conoce todo de ti, no hay pensamiento, sentimiento, miedo o temor que te moleste que Dios lo sabe de antemano.  No puedes tratar de ocultarle nada a alguien que te conoce muy bien.  Pues es el momento perfecto de ir donde El y decirle Dios tu sabes todo de mi, pero te acuerdas de esto o de aquello, pues todavía me afecta.  Quiero que me ayudes a sacar de mi todo aquello que me absorbe, que me drena, que me quita energias, incluyendo personas...deja entrar todo lo que traiga paz a tu vida y sentirás la diferencia.  Al final del salmo dice: "Dios mío, mira en el fondo de mi corazón, y pon a prueba mis pensamientos.  Dime si mi conducta no te agrada, y enséñame a vivir como quieres que yo viva".  Estás dejando todo el control de tu vida a una persona que antes que nada te conoce muy bien y que después de todo quiere lo mejor para ti.  Empieza tu día incluyendo a Dios en tu vida.  No solamente tu notarás la diferencia, si no todos los que te miren verán la paz de Dios refleja en tu vida.

No hay comentarios: