La biblia habla de dos hombres llamados Esaú y Jacob, eran gemelos pero no idénticos. Jehová le profetizo a Isaac sobre estos dos muchachos y le dijo que había dos naciones en ellos. Esaú era diestro en la caza y hombre de campo, pero Jacob era quieto y siempre estaba en sus tiendas. Isaac, su padre, era loco con Esaú, porque tenían afinidad, y Jacob era apegado a su mamá. Crecieron, se hicieron hombres pero Isaac envejecía y estaba ciego. Un día le dice a su hijo mayor Esaú que como se puede morir en cualquier momento, quería bendecirlo. Lo mandó a cazar y a preparar un guisado que a el le gustaba. Oyendo su esposa esta conversación, habló con su otro hijo, para que lo engañara y lo bendijera a el. Hicieron un plan, se puso las ropas de su hermano, se disfrazó, le dió el guisado y hasta tomó vino, y su padre lo bendijo. Cuando vino Esaú a buscar su bendición, ya su padre había dado la bendición al otro, y descubrió que había sido engañado. Anteriormente se apoderó de la progenitura de su hermano y ahora de la bendición de su padre. Y Esaú le gritaba llorando: "Bendíceme también a mí, padre mío", pero ya no se podía hacer nada. Jacob se fue hasta que se le pasara el coraje a su hermano, pero con el tiempo volvió y Esaú lo recibió de lo mas contento. (Génesis 25: 19). En nuestra vida siempre va a parecer alguien que te quiera robar tu bendición. Eso que Dios te habló, te profetizó, te prometió, alguien va a venir a tratar de engañar, alguien se va a disfrazar, alguien se va a confabular, y por medio del engaño querrán robarte tu bendición. En este caso fue un hermano, pero en tu caso puede ser un amigo, un vecino, una pareja, un familiar, pero alguien aparecerá a quitarte tu bendición. No se lo permitas, lo que Dios te prometió, El lo cumple. No le permitas a nadie que se beneficie de ti, que use tus talentos, tus conocimientos, tus bendiciones para su beneficio, y de ese modo robarte el ministerio que Dios te prometió.
HOY TE DIGO que si Dios te ha declarado una palabra profética, te ha prometido un ministerio, te ha garantizado un milagro, ha declarado sobre tu vida una palabra de bendición, es necesario que estés muy atento porque vendrá alguien a tratar de arrebarte lo que es tuyo. Siempre aparece alguien que orquestado por el enemigo, hace un plan de engaño, de maldad, de mentira, y con eso pretendo robarte tu bendición. Pero lo que Dios ha decretado sobre tu vida, no importa el tiempo que pase, no importa las circunstancias, no importa la crisis que estés viviendo, toda palabra se cumplirá sobre tu vida. Si te robaron tu bendición, prepárate a que Dios haga justicia por ti. Pero no te vas a quedar sin tu milagro, sin tu ministerio, sin tu promesa. Si te robaron tu bendición hoy Dios la arrebata y te la devuelve. Todo lo que Dios decretó, lo que te prometió, lo que te dijo, está garantizado que se cumplirá sobre tu vida.
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