viernes, 15 de julio de 2011

BOLETO DE IDA Y VUELTA

Todos los que alguna vez hemos viajado, compramos boletos de ida y vuelta a nuestro destino.  El boleto tiene unas especificaciones:  fecha, hora, línea aérea y el terminal.  Ambos boletos tienen estos datos que son los que te indican cuando te vas y cuando regresas.  Puedes ir al aeropuerto dos días antes, dos horas antes, o a otro terminal y no logras salir, porque es exactamente cuando dice tu boleto.  Tampoco puedes transferirlos, ni cancelarlos, ni alterarlos. Tu nombre está impreso y solo viajas con una identificación.  Vas al lugar de tu destino  el tiempo acordado y regresas.  Así funciona la compra del boleto de ida y vuelta.  En nuestra vida, llegan pruebas, problemas, situaciones, enfermedades o crisis, pero vienen  con su boleto de ida y vuelta.  Dios está en control de los boletos, y permite que tal día a tal hora llegue una situación a tu vida, pero también le tiene el boleto de vuelta.  A tal día y a tal hora saldrá y no puede quedarse ni un día mas en tu vida.  Cualquiera que sea la situación que estés viviendo, tuvo su boleto de ida pero también tiene su boleto de vuelta.  Soporta la situación porque no vino para quedarse, tiene su tiempo de expiración, en el momento que Dios le ordene saldrá de tu vida sin mayores consecuencias.  No te agites por la situación, espera confiado, porque pronto le toca partir.  Si llevas tiempo en esa situación declara a tu problema que ya Dios te entrego su boleto de vuelta, que se tiene que ir y abandonar tu vida. 

HOY TE DIGO que todo lo que estas viviendo hoy, la prueba, la situación, la crisis ya tiene su boleto de vuelta.  Según llegó, así se tiene que ir.  Dios permite todo con un propósito y por un tiempo.  Una vez se vence el tiempo de duración, tiene que abandonar tu vida con su boleto de vuelta.  Por grande que sea la situación, por difícil que te parezca, por eterna que encuentres tu batalla, tiene que dejarte e irse.  Dios permite situaciones a tu vida para que crezcas, para que madures, para que adquieras sabiduría divina y puedas ayudar a otras almas necesitadas.  No te quedarás atorado en esa situación.  Cuando Dios permitió que la prueba tocara tu vida, ya también había permitido el momento que te abandonaría.  Gózate en este momento porque tu prueba está a punto de tomar el vuelo de regreso y dejarte a ti solamente con grandes lecciones de vida, que te permitirán crecer espiritualmente.  En Filipenses 4:13 dice:  "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece".  Es hora de llenarte de nuevas fuerzas, porque a tu situación le llego el boleto de vuelta.

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