En Puerto Rico, el 4 de julio de 2011, se llenaron las playas por ser día feriado, y la gente dejó mucha basura en los alrededores. Pero a pesar de eso, en la Playa de Ocean Park la naturaleza decidió darnos un espectáculo. Decenas de tinglares recién nacidos (especie de tortuga en peligro de extinción) salieron de su nido, caminaron al mar y le dieron al público presente una imagen que recordarán siempre. 80 ó 90 tinglares caminando directamente al mar, sin que nadie los dirigiera, sin pedir dirección, como si al nacer supieran cual es su destino. Iban llegando uno a uno y metiéndose a la playa y así lograr su objetivo: vivir en el mar. Mientras observaba en el video esta imagen de los tinglares caminando torpemente hacia el mar, lo que parecía un viaje interminable, viene una ola grande y una niña se asusta porque el mar se los iba a llevar, sin entender que eso era lo que precisamente quería hacer la tortuguita: llegar a su hábitat. Todos celebran al ver que la primera tortuga logra su meta. Y así van llegando una a una. Esta especie se considera en peligro de extinción cuando se encuentra comprometida su existencia. Las causas pueden ser la depredación, la desaparición de un recurso del cual dependa, cambios en el hábitat, por desastres naturales o por cambios del clima. Las tortugas marinas son los reptiles más antiguos existentes. Ponen huevos en la arena y normalmente habitan los océanos tropicales. El peso de los adultos varía entre 88 a 1,430 libras. Las hembras adultas anidan cada dos a tres años y con sus aletas traseras cavan un nido, en el cual depositan 100 huevos o más y regresan al mar. Los huevos se incuban bajo la arena en 50 a 70 días. Para llegar al agua se guían por el reflejo de la espuma de mar, por eso, la presencia de luces en la playa puede confundirlas y resultar en su muerte. Dios siempre nos da una evidencia de su grandeza, nos da espectáculos impresionantes, nos enseña que la naturaleza que aparenta actuar por cuenta propia, tiene que haber un poder sobre natural para que podamos disfrutar estos sorprendentes sucesos.
HOY TE DIGO que Dios no deja de sorprendernos y siempre nos tiene un nuevo acto impresionante de la naturaleza para que reconozcamos que solo nuestro creador puede hacer esas cosas. Una especie en peligro de extinción, aparecen decenas de tinglares y como si supieran al nacer que su objetivo es el mar, caminan directamente a el. No saben lo que es, no saben donde está, no saben que harán, pues acaban de llegar al mundo, pero por instinto, por atracción o simplemente por fe, caminan al mar, y reconocen que en ese lugar serán criados adecuadamente. Hoy día hay cristianos en peligro de extinción. Son aquellos hermanos que ciegamente creen en Dios, que no se detienen a preguntar que es, para donde es o como es. Por instinto, guiados por su poder sobre natural caminan directamente al lugar de su bendición, creyendo y confiando que su instinto, que su palabra, que su confianza está puesta en Dios. Creen firmemente convencidos, que no necesitan explicaciones ni argumentos. Saben que su objetivo no es el mar como las tortugas, es el lugar donde Dios le mostró que estaría su bendición. "Y ésta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye" 1 Juan 5:14. Si confias plenamente en Dios, camina hacia tu objetivo sin dudar
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